La Sala de Exposiciones del Colegio acoge ‘Allegro Vivace’, la muestra del artista argentino Alberto Rouchetto que se podrá visitar del 17 de junio al 5 de julio en horario de 8 a 20 horas (de 8 a 14 horas a partir del mes de julio) de lunes a viernes.
Alberto Rouchetto ha tocado todos los palos en su trayectoria como artista: es dibujante, ilustrador, diseñador gráfico y, por supuesto, pintor. Argentino de cuna, malagueño de adopción, pinta por placer desde su buhardilla de Benajarafe rodeado de sol y de los atardeceres de esta bella localidad de la Axarquía. Toda esta intensidad de colores convive con su nostalgia porteña que sigue viva, en gran parte, a través de su devoción por el Tango.
Rouchetto describe su arte de forma muy detallada: “Se parece mi pintura al flujo de la vida. Mi mano se mueve sobre la superficie de la tela manchando, sorteando símbolos, grafismos y letras, un poco al azar… casi burlando el ojo que todo controla. Se desliza arrastrando la pintura como bailando un tango expresando sentimientos según estados de ánimo. Valoro el collage, el pegoteo de elementos, la variación de texturas y sobre todo el atrevimiento y la audacia para alcanzar algo personal en mi obra. No tengo objetivos para trasmitir. Es sólo pasión con un mínimo de control, no sé hacer otra cosa, es el flujo de la vida”.
Autodidacta, inconformista, viajero observador y curioso, el artista ha terminado afincándose en España, atraído por su sol y su cautivante cultura colorista. Ha evolucionado de la pintura figurativa hacia el geometrismo y la abstracción en un proceso depurativo donde el color, la línea y la mancha se vuelven protagonistas inequívocos.
Su dominio del pastel, la acuarela y el temple le permiten resolver bocetos de forma rápida y llena de frescura. Por dos veces el concurso de carteles para el Festival de la Cueva de Nerja ha llevado su firma.