Este año se celebra bajo el lema ‘Respetar a los médicos es cuidar la salud de todos’. En la lucha permanente contra la violencia sobre los profesionales, el Colegio de Almería ha actualizado recientemente el protocolo
El Colegio de Médicos de Almería se ha sumado a la celebración del ‘Día Nacional contra Agresiones a Sanitarios’ que se conmemora este año, el 14 de marzo, bajo el lema ‘Respetar a los médicos es cuidar la salud de todos’; el lazo dorado como símbolo y el hashtag en redes sociales #StopAgresiones. En la lucha permanente contra la violencia sobre los profesionales de la salud, el Colegio de Médicos de Almería ha actualizado recientemente el protocolo para que los colegiados sepan cómo actuar tanto ante una situación de amenaza o agresión como frente al supuesto en que la agresión se haya consumado.
El manifiesto que los médicos han promovido para esta ocasión recuerda que: “el 11 de marzo de 2009, María Eugenia Moreno, una MIR de Medicina de Familia murió asesinada por un paciente, mientras ejercía su trabajo en el centro de Salud de Atención Primaria de Moratalla (Murcia)”. Por este hecho, afirma el manifiesto, “se puso en marcha el Observatorio Nacional contra las Agresiones en el Ámbito Sanitario de la Organización Médica Colegial (OMC), cuyo objeto es visibilizar este problema”. Este decálogo, de diez puntos, también solicita que: “las agresiones sean consideradas como delito de atentado contra la autoridad en el ámbito privado al igual que en el ámbito público; y que todos los centros, tanto públicos como privados, cuenten con planes de prevención de riesgos laborales, establezcan protocolos de actuación ante las agresiones y contemplen medidas de seguridad tanto de hospitales como en centros de salud”.
El documento, además, añade que las: “Agresiones físicas, insultos, amenazas, injurias, intimidaciones o maltrato forma parte de la violencia contra los profesionales de la salud, una lacra de indudable repercusión social que afecta a la actividad sanitaria, a la relación de confianza entre médico-paciente y demás profesionales sanitarios, a la salud del personal agredido y a la calidad asistencial que reciben los propios pacientes”.
En total, cerca de 4000 agresiones se han registrado desde el año 2009; momento en el que empezaron a computarse datos, a través de los Colegios de Médicos de toda España. “La concienciación a los profesionales que trabajan en el entorno de los servicios de salud, la cooperación con las Administraciones públicas -Ministerio de Sanidad, Consejerías de Salud de las Comunidades Autónomas, Ministerio de Justicia, Fiscal General del Estado, Fiscalías y Cuerpos de Seguridad del Estado – y la sensibilización de la sociedad, en general, ante este grave problema, ha sido de gran ayuda para abordar esta lacra que requiere de la unidad de todos”, añade el comunicado.
La entrada en vigor, el 1 de julio de 2015, de la reforma del Código Penal que contempla las agresiones a sanitarios que trabajan en el sector público como delito de atentado contra la autoridad, ha sido uno de los logros más importante en la lucha contra este problema. No obstante, el Observatorio Nacional de Agresiones de la OMC sigue trabajando para que las agresiones a sanitarios sean consideradas como violencia social, contemplando la consideración de delito contra la autoridad tanto si se producen en el ámbito público como en el privado y para que sean penadas con los mismos criterios en todas las comunidades autónomas.